Don Pipón: En el Opencor

Bueno niños otra vez aqui, os moveis menos que los ojos de Sexpinete. Asi os va la vida, pequeños desgraciaos de mierda. Y no me mireis asi que os meto una ostia que os tumbo cabrones. Bueno, ya que hemos entrado en calor voy a abrirme una botellita de Baileys.

Que rico mi Baileys, es que no hay nada que me de mas placer que esto, ni siquiera putear al asqueroso Sexpinete, ni un buen polvo, que diga, polvorón. Coño que no se os escapa na, pedazos de guarros y guarras. To el dia pensando en el seso, sois unos putos adictos al seso, cabrones. Y menos mal que aun sois chiquitillos.

¿Que os cuento ahora? Pues bueno, que el Baileys este está de puta madre, vamos. Ya es la novena botella que abro en dos dias. Cuando fuí hoy al Opencor de aquí de Barrio Sexsamo a por mas, me dijo la tendera (que pa mi que está con el Xema, el panadero):
-¡Don Pipón!
-¿Qué quieres, tendera de mierda?-le contesté yo como un caballero.
-Atrincame el cojón, mamón.
-Tu puta madre desgraciá- y le metí dos ostias bien da en la cara que la tumbe contra la zona de las compresas.
-Coño Don Pipón que era broma.
-Vale, vale, me he pasado un poquillo, levantate cacho guarra- y le di mi mano pa que se levantara la mierda esta.

Total que paso de escribiros que se me agua otra vez el Baileys. Tened cuidaito con lo que haceis que os vigilo. Cabrones.